Barranquilla cumplió su cita con la diversidad

Más de diez mil personas llenaron de colores arcoíris las calles de Barranquilla en la 8° versión de la Marcha por los Derechos LGBT. Bajo la consigna “La diversidad nos une”, personas LGBT, sus familias, amigas, el movimiento social, los y las jóvenes y la ciudadanía en general salieron por las principales calles de la ciudad a  marchar, enunciando consignas al ritmo de grupos folclóricos, para exigir que no hayan retrocesos en materia de igualdad y que se consolide tanto en la cultura ciudadana como en la clase política acciones concretas y prácticas cotidianas para que la diversidad sexual, las identidades y expresiones de género no sean motivo de exclusión sino de integración en la sociedad.

Barranquilla inició su proceso de movilización social en 2011, meses después de que en la ciudad se creara la Mesa LGBTI, un espacio de articulación entre las organizaciones sociales y activismos de la ciudad, para construir espacios en común de incidencia ante el gobierno distrital y departamental e infundir en la ciudadanía  buenas prácticas para abonar a la diversidad, luego de que un informe de “Barranquilla como vamos” 2009 destacara un 53% de intolerancia de la ciudadanía hacia las personas LGBT.

El primer recorrido en 2011 salió de la emblemática plaza de San Nicolás, pasando por el paseo Bolívar y terminando en la Plaza de la Paz, el año siguiente el recorrido –buscando incidir más en la ciudadanía- cambió saliendo del parque Luis Carlos Galán, con el mismo recorrido que se conserva hasta hoy. Encuentro que termina con un acto de muestras simbólicas, reflexiones sociales y actividades culturales que, en la plaza de la Paz –mayor lugar de eventos públicos de Barranquilla-, convoca a un gran mensaje de solidaridad con las agendas locales de la diversidad sexual, identidades y expresiones de género.

El proceso de movilización ha tenido dos aliados históricos: la Alcaldía Distrital, que a pesar de no tener un compromiso constante en su Plan de Desarrollo con las agendas LGBT, año tras año no ha dejado de apoyar logísticamente la movilización.  También el Carnaval Gay de Barranquilla, la máxima expresión de movilización LGBT de Colombia (desde 1984), que no solo ha sido el precursor de las acciones de la movilización social en el Caribe y Barranquilla, sino que en las dos últimas versiones de la marcha ha aprovechado esta expresión para anunciar a los reyes del carnaval LGBT, conectando este acto que es por esencia político con la movilización de carnaval que es festiva y cultural.

La marcha de 2018 se caracterizó por una gran presencia de familias y amigas y amigos de las personas LGBT, padres acompañando sus hijos, padres jóvenes llevando sus hijos pequeños, sindicalistas, defensores y defensoras de derechos humanos, el movimiento de mujeres, iglesias progresistas, colectivos estudiantiles, entre otros, demostraron que ésta no es una marcha de los LGBT, sino un proceso de movilización de toda la ciudadanía.

La marcha terminó, pero quedó en el ambiente la convicción que la igualdad no tiene reversa y que ante un panorama tan hostil como el que ha propuesto el gobierno electo y sus aliados de echar para atrás avances en materia de derechos LGBT, no solo no permitiremos que nos regresen al closet del miedo, sino que tenemos miles de aliados en la ciudadanía que le apuestan a no tener retrocesos y resistir para mantener la igualdad; con la firme convicción que no daremos ni un paso atrás.

Saludamos ejercicios similares en 9 territorios más del caribe que pintaron de arcoíris nuestra región y nos demostraron que otro caribe es posible: el de la diversidad y la equidad social.


Disfruta a continuación las mejores imágenes de la Marcha: