13 de mayo de 2020. El movimiento LGBTI en el departamento de la Guajira lleva años insistiendo por el reconocimiento de sus derechos, presionando para que existan de garantías por parte de las administraciones y fortaleciendo los procesos comunitarios, especialmente en Riohacha en Maicao y Uribia. Una de las grandes victorias de los líderes y lideresas ha sido contar con la construcción de la línea base y lineamentos de política pública LGBTI conseguido en el periodo 2012-2015, responsabilidad que estuvo en manos de la Corporación Caribe Afirmativo, quien ha fortalecido su trabajo en varios municipios como Maicao con la Casa de Paz, explorando las diversas identidades en las que también confluyen las personas OSIGEG, las cuales los colocan en muchos casos ante la discriminación y exclusión derivada del prejuicio. Evidentemente, existe un compromiso con este grupo poblacional que se caracteriza por la resistencia.
Aparentemente, se ha retomado nuevamente este adeudo, hace pocos días se desarrolló el Plan de Desarrollo “Unidos por el Cambio de La Guajira 2020 – 2023” en cabeza del gobernador NEMESIO RAÚL ROYS GARZÓN, con la participación activa de la comunidad de cada uno de los quince (15) Municipios del Departamento a través de las siguientes mesas sectoriales: Educación Superior, Economía, Indígenas, Afrodescendientes, Comunal, LGBTI, entre otros. En estos espacios se expusieron iniciativas del desarrollo departamental que permitieron la construcción de una ruta planificada de inversión para los próximos cuatro 4 años y dar solución a los múltiples problemas que padece la comunidad, una apuesta para cerrar brechas y satisfacer las múltiples necesidades que ostenta la población de La Guajira.
La planificación de este plan de desarrollo se basó en una concepción de manera transversal, en el concurrían las realidades: institucionales, económicas, socioculturales y ambientales, como una forma para un desarrollo sostenible basado en el avance humano. En ese sentido, para mejorar los estándares de vida se apuesta por una sinergia de objetivos, programas, acciones y proyectos integrales.
Al tocar lo relacionado con el tema de las personas OSIGEG diversas, el Departamento de La Guajira parte de la existencia de factores como: la homofobia, la intolerancia social, intimidación, la discriminación, los crímenes de odio, segregación cultural y desplazamiento forzado y la desinformación, los cuales limitarían el reconocimiento e ingreso de sus problemas en la agenda pública. Bajo esta premisa, se ideó la necesidad crear acciones afirmativas focalizadas, la construcción de un tratamiento transversalizado y acciones pedagógicas de sensibilización sobre las mismas.
De tal manera, cuando se construye la línea estratégica “Equidad social” se planifica una serie de tácticas para la Inclusión social y productiva de la población en situación de vulnerabilidad en el que se incluye las personas OSIGEG, con la finalidad de garantizar el ejercicio efectivo de los derechos de estos, y su participación en los diferentes sectores sociales. Es así que en materia de salud pública existe una transversalización de la acción hacia las personas LGTBI, en lo referente al Servicio de gestión del riesgo en temas de salud sexual y reproductiva, por otro lado, con el denominado “Programa 17. Inclusión social y productiva para la población LGTBI en condición de vulnerabilidad”, se establecen como metas del cuatrienio:
- Política Pública para la población LGBTI, orientada a garantizar el ejercicio pleno de sus derechos.
- Servicio de conmemoración de fechas significativas para la población LGBTI con campañas para promover el respeto y la no discriminación de la población LGBTI.
- Promover el empoderamiento y la inclusión productiva de la población LGBTI.
La invitación desde esta organización de la sociedad civil es a tener en cuenta que la implementación de las acciones planificadas se realice de manera diferencial, y no de manera diferenciada, lo cual permitirá verdaderamente convertir a la Guajira en una sociedad incluyente y respetuosa de la diversidad. De igual manera, elevamos una solicitud sobre problemas y situaciones estructurales que hasta el momento no se han tenido en cuenta, ellos son: las vivencias de las personas indígenas LGBTI, los padecimientos de personas migrantes venezolanas LGTBI, y los altos índices de pobreza y desigualdad, los cuales conforman grandes círculos de pobreza, vulnerabilidad y marginalidad difíciles de superar, en especial, cuando hay presencia de una mirada homogenizante y normalizadora. Para garantizar los derechos de las personas LGTBI es necesario partir de cada una de las facetas que se asumen en una realidad, las cuales en muchas ocasiones elevan los grados de vulnerabilidad, aún más, cuando hay presencia del prejuicio.
Le solicitamos a la Asamblea Departamental que destine el presupuesto para la ejecución e implementación de todos los programas y proyectos, pues de ellos depende la generación de estrategias para que las personas LGBTI se incluyan efectivamente en todas las esferas, también que se comprometan a realizar seguimiento sobre la elaboración de política pública en diversidad sexual y de género, una de las metas importantes en este plan de desarrollo. En ese sentido, le recomendamos que presione para que se tenga en cuenta el documento elaborado por esta organización en el 2012, el cual es un reflejo de las necesidades de las personas LGBTI del departamento desde una mirada intersectorial y transversalizadora. Esperamos que compromiso continúe, especialmente cuando corresponda el término para deliberar su aprobación.