El Vuelo del Turpial

Un nuevo comienzo es posible a pesar de las adversidades de la migración

14 de agosto de 2021. “¡Sin miedo al éxito! Las personas LGBTI debemos atrevernos a triunfar y dar lo mejor de nosotras en un país que nos ha abierto las puertas y nos está brindando algunas oportunidades para salir adelante”, así lo afirma Vilanyeli Sandoval, una mujer trans de 26 años quien emigró de Venezuela por varios factores vinculados a la profunda crisis económica y social que empobreció a la sociedad venezolana y generó una grave crisis humanitaria.

Nacida en el municipio de Santa Rita (Zulia), esta joven venezolana trabaja en un salón de belleza en la ciudad de Barranquilla (Colombia) y cada día enfrenta con valentía el miedo, la preocupación y la zozobra de estar a muchos kilómetros alejada de su familia, la cual, dejó en el año 2019 con el anhelo de alcanzar una estabilidad financiera que le permitiera mejorar su calidad y proyecto de vida, libre de angustias.

Llegar a Colombia representó un largo viaje en el que tuvo que arriesgarse a todo con miles de familias que intentaban llegar a Colombia. Fue duro y doloroso hasta llegar a la frontera, pero siempre continúo el camino con la moral casi intacta. “Fue un viaje complicado. No obstante, en la vida se debe luchar por lo que se desea. En Venezuela había pocas posibilidades de ganarse la vida y yo quería salir adelante”, afirma Vilanyeli.

Asumir la decisión de emigrar y cruzar las fronteras para vivir en otro territorio no es una decisión fácil. Es un viaje de incertidumbre que implica enfrentarse a cambios significativos en los modos de vida y conlleva a encontrarse con otros paisajes de la cotidianidad cultural y hasta aguantar en algunos casos: el rechazo y el desprecio.

“Aún cuando he encontrado algunas oportunidades laborales en Colombia, he tenido que experimentar discriminaciones por mi nacionalidad y por ser una persona diversa. Así que me he llenado de valor para enfrentar estas situaciones de la mejor manera y que no me afecten. Claro a veces quieres llorar, pero se debe seguir adelante con una actitud positiva”, destaca.

Cabe mencionar que a pesar de que en los últimos años ha habido avances importantes en el reconocimiento de los derechos de las personas LGBT, estás pueden llegar a experimentar violencia sistemática y prejuiciosa que se agudiza al tener una condición migrante.

A su vez, situaciones que rodean el tránsito de personas LGBT al territorio colombiano responden a la falta de oportunidades históricas que han tenido las personas con orientaciones sexuales e identidades y expresiones de género diversas, por lo que es más probable que migren de manera irregular. Además, en muchas ocasiones, no se les brindan garantías en materia de salud, y se deben enfrentar a barreras de discriminación y xenofobia.

“Se debe entender que nosotras migramos por necesidad, no por placer. Dejamos nuestros hogares e iniciamos una peligrosa travesía con unas cuantas maletas. En mi caso, que contenían ropa y la ilusión de desempeñarme como estilista y ser una de las mejores. Día a día trabajo en eso y esto gracias a que comencé mi preparación como estilista en Venezuela y ha sido en Colombia donde he podido ejercerla”, expresa muy animada.

Para CARIBE AFIRMATIVO ninguna experiencia de la ciudadanía venezolana migrante LGBT se parece a otra, por tanto, ningún relato es igual al otro. Hemos buscado maneras de construir memoria presentando todo lo que conlleva migrar a través de cada uno de sus matices.

“Llegar a un nuevo país implica aprender sus costumbres, relacionarse con la gente, ser precavida con quienes hablas y entablas una amistad; buscar vivienda y empleo. Además de la nostalgia por lo que dejamos y por todos los momentos especiales que nos perderemos estando acá”, indica.

Un gran número de personas venezolanas han salido de su país para escapar del hambre, la escasez, la situación política en deterioro y la violencia en la mayor migración masiva en la historia de la región que inició hace seis años. Ayudarlas a integrarse a la sociedad colombiana se ha convertido en un enorme desafío humanitario, esto sumado a las problemáticas que se generaron a raíz de la pandemia de COVID-19, que recrudeció las condiciones de precariedad y vulnerabilidad de la población LGBTI migrante.

Desde CARIBE AFIRMATIVO invitamos a la institucionalidad a dar respuesta inmediata a los desafíos que sigue presentando el fenómeno de migración venezolana en el país, e invitamos a la ciudadanía migrante y de acogida a seguir nuestros procesos relacionados con Movilidad Humana que permiten la activación de rutas y protocolos de atención con enfoque diferencial y perspectiva de derechos que contribuye a que las personas LGBT migrantes puedan gozar de una ciudadanía plena en el país.