Este martes se llevó a cabo la presentación de este Comité, que tiene como objetivo avanzar hacia la reconciliación y las garantías de no repetición del conflicto armado.
Culminó el mandato de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad (CEV), pero dejó instalado el Comité de Seguimiento y Monitoreo de sus recomendaciones, que se posesionó el pasado ocho de agosto y este martes fue presentado de manera oficial. En este, son siete personas que –desde diferentes sectores y territorios– destacan por sus liderazgos en materia de defensa de derechos humanos, construcción de paz e implementación del Acuerdo Final de La Habana.
Sobre lo anterior, este comité está integrado por las siguientes personas: Marina Gallego, fundadora y coordinadora de la Ruta Pacífica de Mujeres, con más de dos décadas de trabajo en la construcción de paz desde la perspectiva de las mujeres; Wilson Castañeda, director de la corporación Caribe Afirmativo y con amplia trayectoria en el movimiento LGBT; Armando Valbuena, líder indígena wayúu, exdirector de la ONIC y miembro de la Instancia Especial de Alto Nivel de los Pueblos Étnicos para el Acuerdo de Paz.
También hacen parte de él Dorys Ardila, docente investigadora exiliada en España desde 2003 quien se ha desempeñado como vocera de los colombianos en el exterior en el Consejo Nacional de Paz; Marco Romero, quien por 30 años ha trabajado por los derechos de la población desplazada y es el director de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes); Julia Cogollo, lideresa afro del Caribe con más de una década de trabajo con víctimas del conflicto y violencia sexual; y Angelika Rettberg, experta en temas de resolución de conflictos, académica y docente en la Universidad de los Andes.
En el evento de presentación del Comité, el padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, aseguró tener plena confianza en quienes integran esta instancia, manifestando que estas personas trabajarán “con determinación y grandeza” durante siete años, que es el tiempo establecido para que el Comité haga seguimiento a la implementación de las recomendaciones de la comisión.
Durante su intervención en la presentación del Comité, Wilson Castañeda, director de Caribe Afirmativo, expuso su apuesta por lo territorial, enfatizando en que es importante “seguir los pasos” de las comisionadas y comisionados en muchos territorios, donde estas personas reafirmaron el hecho de que la construcción de paz debe ser con la ciudadanía colombiana. “Este Comité va a hacer esa lectura de monitoreo y evaluación de la vida cotidiana de colombianos y colombianas en todos los territorios para que empecemos a ver que la paz es una realidad. Trabajaremos para que las personas, especialmente las que fueron afectados por el conflicto armado, puedan vivir con dignidad y alegría”, puntualizó Castañeda.
Principales labores
Tras la instalación del Comité, las personas que lo integran dieron inicio a la elaboración de un plan de acciones, encaminadas a garantizar el cumplimiento de las funciones de esta instancia. Entre los puntos, se incluyeron los siguientes:
1. Definir una agenda de futuro para avanzar en un diálogo sobre las transformaciones necesarias en el país y poner fin a las confrontaciones armadas que existen.
2. Contribuir a la reconstrucción de confianza entre la sociedad y las instituciones para avanzar hacia la reconciliación y las garantías de no repetición.
3. Punto de entrada para la paz completa que permita que todas y todos tengamos garantizados nuestros derechos.
4. Promover la búsqueda de consensos fon enfoque territorial, atendiendo los e impactos diferenciados.
5. Contribuir a la política de memoria y verdad para la construcción de paz y no repetición que comprometa al Estado y a la sociedad en su conjunto.
6. Contribuir a la construcción de mecanismos de profundo impulso institucional para la transformación que Colombia necesita.
7. Promover un diálogo deliberativo que reconozca la participación y movilización ciudadana como herramientas fundamentales para la garantía de derechos.
8. Construir una visión compartida de país desde los territorios, con énfasis en grupos poblacionales y sectores excluidos.
9. Garantizar en la vida del país la implementación de los enfoques de género, étnico y territorial, como condición para La Paz total.
10. Campañas de cultura y pedagogía ciudadana para la transformación de la cultura violenta.