8 de abril de 2020. El día de hoy, la Alcaldía de Bogotá decidió mediante el Decreto 106 de 2020 que, durante la cuarentena, las personas podrían salir de sus casas de acuerdo a su sexo-género en términos binarios, un día hombres y otro día mujeres; pensando en las personas trans, se permitió que fuera el autorreconocimiento y no su documento legal el que les permitiera decidir qué día salían. Esta medida no es algo nuevo e innovador, dado que la han adoptado en países como Perú y Panamá, el problema está en que en esos países ha servido como sustento para discriminar a las personas trans y otras.
La decisión adoptada tiene un sinnúmero de problemas, más allá del contenido del texto, los cuales enumeramos a continuación:
- Aumenta los riesgos que ya enfrentan las personas trans en los espacios públicos y los espacios privados abiertos al público, dejando en poder de la Policía Nacional, entre otras autoridades, la posibilidad de definir, conforme al Decreto, qué día pueden salir y qué día no. La Policía Nacional, como han revelado un sinnúmero de informes de derechos humanos y ha sido reconocido en instancias judiciales, es una de las instituciones que más ha violado los derechos de las personas trans, sin importar ninguna norma, ni siquiera la Constitución, actuando motivada por prejuicios. Este Decreto les abre otra puerta para continuar actuando en esta línea y, evidentemente, que el Decreto defina una situación específica para las personas trans no es garantía de nada en la práctica ni a la hora de acceder a la justicia, como ni siquiera lo ha podido ser la Constitución.
- No tiene en cuenta a las personas que no se autorreconocen ni como hombres ni como mujeres, es decir, ¿qué día deben decidir ellas que pueden salir? ¿deben desconocerse a sí mismas y encasillarse en algo que no desean para poder abastecerse para sobrevivir?
- Genera temor e incertidumbre entre las personas trans, que no sabrán qué día salir para asegurar los múltiples derechos que ahora están en riesgo. No es suficiente con que la cuarentena las haya puesto en situaciones de riesgo excepcionales, como la violencia por prejuicio en sus hogares o la imposibilidad de ganar su sustento diario, sino que ahora para poder abastecerse o hacer cualquier acción de las que están permitidas durante esta cuarentena tendrán que preguntarse si pueden salir o no, ya que la policía ahora tiene el poder, en la cotidianidad del día a día, para definir qué personas salen o no de acuerdo a su género.
- Las personas trans se sentirán intimidadas para ir incluso a sus citas médicas, muchas de ellas necesarias para continuar con tratamientos hormonales o que están encaminadas a asegurar, además de su salud, su derecho al libre desarrollo de la personalidad, dignidad humana, entre otros.
Las anteriores consideraciones solo se refieren a los problemas por la implementación del Decreto. Lo anterior no excluye el debate jurídico sobre la constitucionalidad o no de un Decreto que propone medidas restrictivas de la libertad a partir del género de las personas que habitan la ciudad de Bogotá. Sin ninguna duda enfrentamos una pandemia que amenaza el bienestar de la ciudadanía y que nos mantiene en un riesgo permanente de contagio, por lo que se han tenido que adoptar medidas como la cuarentena y el aislamiento, no sin antes advertir que estas medidas implicaban otros riesgos. Sin embargo, en esta ocasión es necesario cuestionar una medida restrictiva de la libertad basada en el género de la persona. Esta medida tendría dificultades para superar un test de proporcionalidad, porque aunque pueda ser considerada por algunas personas como idónea para su fin, es decir, reducir el número de personas que transitan las calles durante la pandemia o “facilitar” el control por parte de agentes policiales sin acercamiento o solicitud de cédula, es a todas luces innecesaria porque hay muchas otras medidas que no ponen en riesgo el derecho a la igualdad y no discriminación de la ciudadanía, restringen el margen de discrecionalidad de quienes aplican las medidas en las calles y no agudizan la grave situación que viven grupos poblacionales como las personas trans y las personas género no binario.
En Caribe Afirmativo exhortamos a la Alcaldía de Bogotá a que retire esta medida y que, para proteger y garantizar los derechos de las personas trans, tome otras decisiones dirigidas a mitigar los efectos de la pandemia, sin poner en riesgo a algunos grupos poblacionales. Aún estamos a tiempo de evitar que se incrementen los casos de violencia policial por la aplicación de este pico y género, y brindarles a las personas trans verdaderas garantías para el ejercicio de sus derechos.
Comments (2)
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Yadira Kordon López
abril 8, 2020Ya es suficiente con la discriminación que tenemos luego con el aislamiento q nos priva de trabajar y si no trabajo No como…y ahora nos vamos a enfrentar ala policía como años atrás por tan solo ver una chika trans en la calle no avanzamos si no que retrocedemos el tiempo de mal trato…y los que ganan sueldo desde sus casas felices y de acuerdo con estás absurdas normas que atropellan siempre a nosotras las transgénero excluidas de sus buenos tratos..y ahora que sigue señoras sabelotodo
Caribe Afirmativo
abril 13, 2020Hola, Yadira. Cuéntanos desde dónde nos escribes. Cómo podemos ayudarte.