11 de mayo de 2020. Los planes de desarrollo son una herramienta de gestión que busca el avance social de un territorio, a través de ellos, se sientan las bases para atender las necesidades insatisfechas de la población y mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos y ciudadanas que habitan una entidad territorial. Un compromiso que que adquirieren los mandatarios y mandatarias 2020-2023 elegidos por la democracia participativa, se obligan a garantizar de manera efectiva los derechos de las personas, entre ellos, quienes se identifican con orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género diversas, su deber es y será construir una Colombia pluralista e incluyente.
En este sentido, el pasado 22 de marzo el Cesar se convirtió en el primer departamento del país en aprobar su Plan de Desarrollo para los próximos cuatro años, un proceso liderado por el Gobernador Luis Alberto Monsalvo con la máxima participación de los líderes y lideresas de todos los enfoques y grupos poblacionales como una estrategia determinada para cerrar brechas sociales, para conseguir la equidad y la inclusión de todos los habitantes, y hacer efectivo los derechos sociales, económicos y culturales (DESC): un conjunto de necesidades que viven las personas OSIGEG.
La construcción del plan de desarrollo “Lo hacemos mejor” se basó en comprender que las desigualdades sociales se han constituido el principal obstáculo para lograr la igualdad material. Esta visión, se vió reflejada en los encuentros comunitarios y la insistencia de los líderes y lideresas, organizaciones sociales que promueven el discurso reivindicativo de la diversidad sexual y de género, quienes tuvieron un gran éxito, manifestado en la creación del subprograma IV denominado “Población diversa sexualmente”, perteneciente al eje estratégico I “Calidad de vida para el desarrollo humano” ubicado en su programa I “Estrategia social para vida digna e incluyentes“. En él se idearon una serie acciones y propuestas, cuya búsqueda es la formación de un sistema de protección social que garanticen el ejercicio y goce efectivo de los derechos de la población sexualmente diversa, sus metas trazadoras que consiste en:
- Implementar instrumentos de apoyo estadístico dirigidos a superar la invisibilización en el Departamento del Cesar.
- Desarrollar programas que permitan fortalecer las acciones afirmativas de autorreconocimiento y auto aceptación de las personas sexualmente diversas disminuyendo las problemáticas de salud mental. (Suicidios, depresión, neurosis, consumo de sustancias psicoactivas).
- Realizar acciones de promoción y fortalecimiento que permitan la humanización en las instituciones que prestan servicios, cualquiera que sea su naturaleza, a la población sexualmente diversa garantizando el derecho al libre desarrollo de su orientación sexual.
- Formar a la comunidad educativa en normatividad vigente que permita garantizar el acceso en igualdad de condiciones y sin ningún tipo de discriminación, a las personas sexualmente diversas a las instituciones educativas públicas y privadas.
- Desarrollar acciones afirmativas transversales para sensibilización y capacitación a funcionarios públicos sobre temáticas LGBT.
- Fortalecer el emprendimiento en la población LGBT a través de asesorías, estudios de mercados y realización de planes de negocios para participar en fondos de financiación.
Por consiguiente, la Gobernación del Cesar apuesta por el reconocimiento de los derechos fundamentales: al desarrollo libre de la personalidad, la igualdad y el principio de la no discriminación, una vida libre de violencias y a una vida digna; todos hacen parte del compromiso que tiene el Estado Colombiano y se le ha negado a las personas OSIGEG por el prejuicio, la discriminación y exclusión normalizada en muchas partes del Caribe. Esta es una apuesta ambiciosa, pero no imposible que se desarrollará con la transformación de los imaginarios que imperan en tierras vallenatas.
Desde Caribe Afirmativo exhortamos a la Gobernación del Cesar a tener en cuenta que en la implementación de sus acciones observé con mesura la concurrencia de identidades sociales en la ciudadanía, las cuales pueden aumentar los grados de vulnerabilidad que gestan los círculos de pobreza y marginalización. Es necesario realizar una mirada intersectorial con la aplicación de enfoques diferenciales para que las estrategias planeadas se cumplan al finalizar el cuatrienio. Es fundamental comprender que para construir un territorio es necesario una óptica transversal e intersectorial.
En el marco del COVID-19, los invitamos a fortalecer los trabajos que vienen planeando y ejecutando con los grupos más vulnerables, como los habitantes de calle y trabajadores sexuales, de tal manera, siempre se les garantice el respeto a sus derechos humanos y a la autonomía de sus vidas, y no incurrir en prácticas de re victimización para ellos.