Con la trágica muerte de Jesús Alberto Sánchez Payares el pasado martes 26 de marzo de 2019, muchos medios de comunicación amarillistas, que en nuestro contexto parece que se toman cada vez con más fuerza el espectro noticioso de la ciudad, pero incluso la misma Policía, lanzaban sus noticias y comunicados con encabezados que hacían referencia al “crimen pasional de un miembro de la comunidad LGBTI”. Detrás de estas manifestaciones mediáticas sobre el denominado “crimen pasional”, existe una vulneración a los derechos de las víctimas y la reproducción de un imaginario negativo e infundado de las personas LGBTI. Caribe Afirmativo reprocha entonces esta forma de llamar la violencia y solicita a la policía ya los medios que cesen la utilización del término.
Es necesario recordar, primero, que no se pueden aceptar y que no existen crímenes por amor. Es el odio, la discriminación y los prejuicios los que inspiran a una persona a quitarle la vida a otra. Este caso, en otras palabras, es un homicidio, y punto. No se puede asociar este tipo de crímenes con sentimientos como el amor o la paz. En este sentido, y cabe también recordar, no existen justificaciones basadas en la guerra para la paz. En ambos casos, al tratar un crimen con justificaciones en el amor, o al justificar la guerra con intenciones de paz, se está incurriendo en un absurdo y una desviación de los imaginarios sociales que con frecuencia caen en la trampa de encontrar relación en estos aspectos.
En igual sentido, la Corte Suprema de Justicia, en su primera condena por el delito de feminicidio, ha esclarecido que asesinatos por motivos pasionales tienen que ser penalizados como feminicidios en el caso en que se trate de una mujer, en consideración a diferencias y más, desigualdades e injusticias históricas, o en el caso de un hombre, es entonces un homicidio.
Desde Caribe Afirmativo se hace un llamado a las instituciones públicas, especialmente a la Gobernación del Atlántico y a la Alcaldía de Barranquilla, para que se tomen en serio las problemáticas vitales de las personas LGBTI en el territorio, y que prontamente se concrete la Política pública LGBTI que es necesaria. A su vez, como expresión y desarrollo de los derechos a la igualdad y no discriminación se solicita que se extiendan los programas de atención frente al problema de la violencia basada en género y la violencia intrafamiliar que se presentan en las familias conformadas por parejas del mismo sexo o donde una persona del núcleo familiar es LGBT, como en los casos de todas las familias de este país.
Caribe Afirmativo