Durante el registro de los primeros casos de viruela símica se ha difundido información errónea referente al contagio de esta enfermedad, llegándose a considerar, de manera estigmatizante y prejuiciosa, a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres como un grupo de riesgo.
El incremento de casos de viruela símica en muchos lugares del mundo, además de representar una alerta para los sistemas de salud, también ha dado lugar a la difusión de información errónea acerca de la forma de transmisión de esta enfermedad. Inicialmente, hubo mayor registro de esta infección en hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres. Esto podría estar respondiendo al hecho de que las personas LGBTIQ+ suelen hacerse testeos y chequeos médicos de manera más continua.
No obstante, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, cualquier persona puede infectarse de viruela símica, más allá de su orientación sexual, edad, lugar de residencia, entre otros. Es decir, se trata de una enfermedad que se transmite por contacto cercano de piel a piel. Esto puede ser durante relaciones sexuales, abrazos, besos, compartir objetos con una persona afectada, entre otras situaciones.
A partir de esto, se debe hacer énfasis en que cualquier persona puede contraer la viruela símica, por lo cual es importante reconocer la enfermedad como un riesgo para todos y todas. El hecho de que se considere a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres como un grupo de riesgo, refuerza estigmas y prejuicios contra las personas LGBTIQ+.
Es por eso que, desde Caribe Afirmativo, hacemos un llamado a las autoridades de salud y a la sociedad en general a no replicar afirmaciones estigmatizantes hacia personas LGBTIQ+. Estas, además de perpetuar dinámicas de exclusión, también podrían influir en que las personas estigmatizadas sientan temor de pedir ayuda ante un posible contagio.
En esa línea, reiteramos que no se debe seguir informando desde el miedo, ni incurriendo en prejuicios, estigmatización o exclusión porque esto incide en el hecho de que las personas eviten realizarse la prueba por miedo al estigma y se deje de atender el caso de manera oportuna. Por otro lado, enfatizamos en que, conforme a datos del CDC, respecto a la viruela símica, no existen grupos de riesgo, sino conductas de riesgo, asumidas por cada persona, independientemente de su orientación sexual e identidad de género.