Caribe Afirmativo está brindando atención jurídica y psicosocial frente a este caso de violencia por prejuicio, discriminación y lesiones personales.
15 de junio de 2021. El día lunes 31 de mayo en la ciudad de Riohacha, (La Guajira), en horas de la madrugada Yasel José Ramírez un hombre gay perteneciente a la etnia wayuu se encontraba con uno de sus amigos en la vía pública de regreso a su casa. Durante el recorrido pasaron por la discoteca “La Tremenda” en donde varias personas les gritaron obscenidades e insultos en razón de su orientación sexual. Yasel y su acompañante hicieron caso omiso ante estas palabras, pero quienes estaban allí comenzaron a lanzarles botellas provocándoles contusiones y heridas a ambos.
Dentro del grupo de personas que los insultaba, se encontraba un hombre quien los amenazó de muerte y a continuación, según las declaraciones de la víctima envío al grupo de jóvenes que se encontraban con él en la discoteca a que lo persiguiera. En total eran cinco hombres que tenían piedras y botellas en la mano con la clara intención de hacerles daño. Yazel y su amigo huyeron por distintos caminos.
Durante la huída Yazel se cae de manera violenta y a su amigo lo persigue un carro blanco, él se tropieza varias veces obteniendo una lesión en su rodilla y pie izquierdo. Él pide ayuda en un hotel cercano y la recepcionista se da cuenta, pero lo rechaza alegando que no quiere meterse en problemas. Sin embargo, los agresores alcanzan a Yazel y entre cinco hombres lo golpean violentamente, provocándole heridas profundas.
Un celador se encontraba cerca y su amigo le pidió que llamara al cuadrante de la policía y este hizo caso omiso diciéndole que se había metido con quien no debía. Por otra parte Yasel estuvo varios días incapacitado por contusiones, heridas y fractura en uno de los dedos de su pie izquierdo.
Desde Caribe Afirmativo estamos acompañando el caso con la orientación jurídica y psicosocial correspondiente. Sin embargo, este suceso genera una gran preocupación porque constituye un acto de violencia por prejuicio en razón de la orientación sexual de la víctima, como también no hay que desconocer la interseccionalidad del mismo en el que la persona agredida pertenece una etnia indígena, considerando el rechazo y la exclusión histórica que este grupo poblacional ha vivido.
A su vez, es alarmante que varias personas ajenas a la situación que presenciaron los hechos y a quienes las víctimas les pidieron auxilio se negaron a hacerlo por la indiferencia del caso y por una legitimación de la violencia arraigada en la sociedad. Rechazamos este tipo de violencias y solicitamos a la Fiscalía investigar esta situación a profundidad y judicializar a los responsables de estos hechos, teniendo en cuenta que obedece a un crimen por prejuicio en razón de la orientación sexual de la víctima, sumado a ser un acto de discriminación y de lesiones personales.
Con base en lo anterior solicitamos que este caso sea tratado desde un enfoque diferencial y a su vez hacemos un llamado a las autoridades locales de Riohacha a que tomen acciones frente a estos hechos y que existan garantías de seguridad para que las personas LGBT puedan habitar los espacios públicos sin miedo a sufrir algún tipo de señalamiento o agresión, como también a crear una pedagogía en la que no se normalicen estas violencias y cualquier ciudadano o ciudadana pueda reaccionar ante estos hechos y no termine siendo cómplice por omisión de los mismos.
Reiteramos nuestro apoyo a la víctima y nos sumamos a las demás organizaciones sociales, líderes y liderazgos LGBT en exigir acciones afirmativas que hagan frente a estas situaciones de odio y prejuicio que vulneran a las personas LGBT y las excluyen. Invitamos a que se inicie por una pedagogía incluyente desde los espacios públicos y privados, en especial en los contextos escolares en donde es necesario reflexionar sobre estos temas, fomentar actitudes de respeto y empatía que permitan construir sociedades cada vez más diversas.