Las acciones para garantizar la protección a los derechos humanos, la eliminación de formas sistemáticas de discriminación y exclusión, y el reconocimiento a la vida digna de grupos históricamente discriminados, como las personas LGBTI, son mínimas e insuficientes.
Además de ello, las acciones para contrarrestar la inseguridad son meramente restrictivas y policiales y no se abordan de manera integral protegiendo a la ciudadanía, lo que puede generar mayor nivel de vulneración a los derechos humanos.
La Coalición ciudadana del Atlántico es una Plataforma que agrupa diferentes organizaciones de la sociedad civil del departamento y del distrito, defensoras de derechos humanos de poblaciones históricamente vulneradas y excluidas. Es esta misma diversidad, la que nos permite tener una visión integral sobre las necesidades de estas poblaciones, así como generar propuestas en el marco de un ejercicio ciudadano democrático y legítimo.
Teniendo en cuenta lo anterior, presentamos ante ustedes el documento Consideraciones frente al plan de desarrollo Barranquilla capital de vida, en el que se plantean una serie de observaciones generales, así como algunas propuestas concretas en lo que respecta a los siguientes temas: mujer, LGBTI, participación ciudadana, seguridad y convivencia.
Durante estos días en revisión de la propuesta del Plan de Desarrollo que estudia el Concejo distrital, consideramos como grupos poblacionales históricamente discriminados y excluidos que se tengan en cuenta las discusiones y ajustes que se haga a éste documento, que será la carta de navegación que direccionará los destinos de la ciudad y poderla convertir en una “capital de vida” que se sustenta en la dignidad, respeto a la diversidad y condiciones para el ejercicio social de defensa y promoción de los derechos humanos.
Eje: capital de servicios eficientes
Política: alcaldía confiable
Es notorio que en el Plan de Desarrollo se plantea la participación ciudadana como uno de los dos principios fundamentales, bajo la denominación de “un gobierno presente en las calles”. Sin embargo, es importante señalar que este diálogo entre la ciudadanía y el gobierno, más allá de ser un escenario informal y ameno, debe propender por dinamizar los espacios y mecanismos formales de participación, de modo que se logren resultados efectivos y procesos susceptibles al seguimiento y control social.
Frente a la política “alcaldía confiable”, se realizan las siguientes observaciones:
En lo que concierne al programa “Más Comunicación”, sólo se plantea un sólo proyecto, la implementación del “Plan de Comunicaciones Distrital”. Este programa requiere ser explicado de forma más amplia, haciendo mención, por lo menos, de cuáles son las estrategias clave que pondrá en marcha dicho Plan (mayor disponibilidad de información en la página web, publicación previa de la agenda de eventos públicos de la Alcaldía, instalación de un call center para atención al ciudadano, accesibilidad a documentos para el seguimiento de la gestión pública…). Este Plan debe tener la relevancia que merece, ya que las comunicaciones son un componente transversal en el proceso de mejoramiento de los canales de interlocución entre la administración local, las veedurías ciudadanas y organizaciones sociales en general.
El programa “Todos participando por Barranquilla”, evidentemente se queda corto ante la deuda que tiene el Distrito respecto al fortalecimiento de la participación ciudadana efectiva y decisoria (no sólo consultiva), y del control social en el marco de una administración que completará 12 años en el poder y que requiere de unos necesarios y naturales contrapesos para generar una gobernabilidad democrática, legítima e institucional. Este programa tampoco presenta indicadores de resultados, sólo de producto, asociados mayormente a capacitaciones a líderes sociales.
Es importante señalar dos deficiencias graves dentro de los planteamientos del plan: La primera es la invisibilización de la Política Pública de Participación Ciudadana, formulada en la administración anterior, con el apoyo técnico de una respetada y reconocida organización de cooperación internacional, el PNUD. Esta política, que se construyó de manera participativa no puede quedar relegada, debe ser retomada y utilizada como marco para el planteamiento de los proyectos del programa “todos participando”. También es necesario tener como referencia el Estatuto de Participación Ciudadana (Ley 1757), una normativa de carácter nacional que también ofrece algunas orientaciones en cuanto a estrategias a implementar.
Igualmente, no se evidencia un programa específico, dirigido al fortalecimiento de la descentralización en la ciudad. Sólo dentro del programa “Todos participando” se observan dos proyectos puntuales: uno de capacitación a Juntas Administradoras Locales (JAL) y una “estrategia de intercambio” con las localidades, sin que logre comprenderse cuáles son los alcances de la acción propuesta. Teniendo en cuenta el gasto que implica para la hacienda distrital el pago de honorarios a los ediles y alcaldes locales, es más que pertinente asignarles funciones y recursos para su efectivo funcionamiento, no sólo con el objetivo de mejorar la prestación de servicios institucionales, sino de incentivar y dinamizar la participación ciudadana en las localidades.
Entre las propuestas que realizamos desde la Coalición para el fortalecimiento de la participación ciudadana, se encuentran:
Un proceso de rendición de cuentas. Este ejercicio debe abandonar el formato de evento anual, para convertirse en un proceso permanente de interlocución y en la apertura de espacios descentralizados o sectoriales para su realización.
Modificación del Acuerdo 008 de 1995, por el cual se establece la conformación del Consejo Territorial de Planeación, teniendo en cuenta que debe ser ajustado. Dentro de los procesos formativos y de rendición de cuentas también debe ser incluido el CTP.
Creación del Fondo Distrital de Participación Ciudadana con recursos suficientes destinados, en cumplimiento de la Ley 1757 de 2015.
Creación de un Consejo Distrital de Participación, en cumplimiento de la Ley 1757 de 2015.
En cumplimiento de la Ley 1617, implementación de los Fondos de Desarrollo Local, de la mano con un proceso de fortalecimiento institucional de las Alcaldías locales (culminación de la construcción y puesta en marcha de las sedes, delegación de funciones claras y autónomas a las JAL, formulación de los Planes de Desarrollo Locales)
Articulación del programa de participación ciudadana con algunos proyectos de la Secretaría de Cultura, en aras de incentivar la participación comunitaria y social de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes del distrito, como formas alternativas de participación ciudadana.
Debe quedar clara la articulación entre el programa de participación ciudadana y las acciones diferenciales encaminadas al fortalecimiento de la participación de grupos poblacionales como las mujeres, los jóvenes, LGBTI, minorías étnicas, jóvenes y víctimas del conflicto. Estas acciones se encuentran dispersas a lo largo de otros programas, es necesario incluir todos estos en una batería de indicadores con un orden lógico y articulado.
Política: seguridad y convivencia ciudadana
En el Plan de Desarrollo se evidencia una articulación entre los programas propuestos (siete en total) y los planteamientos de la Estrategia de Seguridad y Convivencia 2012-2020, elaborada en la administración anterior. En ese orden de ideas, se continúa invirtiendo en equipamiento para los organismos de seguridad, se plantean algunas intervenciones de corte social y comunitario como estrategia de prevención y además se propone el fortalecimiento de los organismos de justicia tradicionales y comunitarios.
No obstante, de acuerdo con lo plasmado en el diagnóstico, el 2015 cerró con la tasa de homicidios más alta de la última década y la extorsión y el hurto registran un alza. Igualmente, ya son 11 los casos de desmembrados que han consternado a la ciudad, y que las autoridades relacionan con luchas de poder territorial por el microtráfico.
Es fundamental que desde la Alcaldía de Barranquilla se conciba la seguridad desde su concepción holística de seguridad humana, definida por las Naciones Unidas como una visión que subraya la necesidad de contar con una nueva estructura que combine los programas de paz y seguridad, desarrollo y derechos humanos de manera más eficiente y orientada a la prevención, más que a la represión. La seguridad humana propende por la protección al ciudadano(a), pero también a su empoderamiento. Por ello, es necesario analizar algunos de los puntos propuestos en el Plan de Desarrollo para abordar la problemática de inseguridad en la ciudad:
Se presentan indicadores de resultado adecuados (tasas de homicidios, hurtos…), sin embargo, en las metas sólo se plantea “disminuir el índice” sin establecerse en qué porcentaje. Así mismo, estos indicadores deben ser diferenciados por localidad, teniendo en cuenta que los niveles de violencia varían en los cinco territorios distritales. La información presentada en el diagnóstico se puede comparar con la medición de impacto anual de cada indicador de resultado por localidad, para focalizar acciones.
El indicador de violencia interpersonal, debe desagregarse a partir de los diversos tipos de esta violencia (violencia intrafamiliar, riñas callejeras) ya que se trataría de dos escenarios distintos, por ende, de dos informaciones diferenciadas.
En cuanto al proyecto “apoyo al funcionamiento del sistema de justicia cercano al ciudadano”, es fundamental que las acciones sean integrales, que vayan encaminadas, no sólo a la inversión en infraestructura, sino también en recurso humano, especialmente de las Comisarías de Familia, ya que éstas deben contar con personal destinado para dar soporte legal y psicosocial a los ciudadanos que acudan a la ruta de atención.
Se evidencia dentro de las propuestas acciones dirigidas a la formación/capacitación de los funcionarios de los organismos de seguridad, como la Policía Metropolitana y los Comisarios de Familia, sin embargo, no se estipula en qué temas concretamente. Se proponen los siguientes: Derechos Humanos, atención a población vulnerable, derechos de las mujeres, LGBTI, minorías étnicas, atención a la juventud.
Algunos de los proyectos propuestos dentro del programa “Barranquilla respeta y aplica los derechos humanos” deben estar incluidos dentro del eje Capital de Bienestar/Programa de Construcción de Paz, ya que corresponden a atención a población víctima y a la realización de los Comités de Justicia Transicional. Incluir esta atención dentro de la estrategia de seguridad, estimula la estigmatización de los desplazados y víctimas del conflicto.
Se propone el programa “Quilla Goles”, sin embargo, en el diagnóstico no se evidencian los resultados de una estrategia anterior denominada “Va Jugando”. Es fundamental conocer el impacto de dicha estrategia para analizar las posibilidades de éxito de esta nueva propuesta. Igualmente, dentro de los programas y proyectos no se incluye en absoluto el manejo de la drogadicción/ programas P&P, como condición de salud detonante de violencia.
Es importante la creación de la Oficina para la Juventud, que se articule en acciones/proyectos con el Fondo de Seguridad del Distrito y la Secretaría de Cultura, en aras de generar espacios alternativos de esparcimiento y aprovechamiento del tiempo libre por parte de esta población.
Dentro de los programas y proyectos no queda claro cómo será el abordaje por parte de la Alcaldía de la problemática asociada a las “bandas criminales” y pandillas en el Distrito, así como al manejo del microtráfico. Se plantean unos indicadores de gestión (compra de equipos de comunicaciones, vehículos…) pero no queda plasmada una estrategia concreta para hacer frente a esta problemática.
Eje: Capital del Bienestar
Política: paz, lucha contra la pobreza e inclusión social
Dentro de esta política se destaca la vinculación del desarrollo integral y la inclusión social de las poblaciones vulnerables, como un elemento generador de condiciones para el mantenimiento de la paz, a través de la atención integral con un enfoque diferencial y de derechos.
No obstante, haciendo una revisión a los programas y proyectos planteados, así como a los diagnósticos e indicadores, se encuentran dos situaciones a destacar en lo concerniente a la mujer: La prevalencia de indicadores de producto o de gestión, por encima de verdaderos indicadores de impacto y la invisibilización de la existente política pública de la mujer del Distrito dentro del marco de referencia. Así mismo, es evidente la exclusión a la población LGBTI en un Plan de Desarrollo que no logra plantear ni siquiera un programa diferencial para atender a este sector.
De manera puntual, desde la Coalición Ciudadana se proponen las siguientes iniciativas para la atención a las mujeres:
El proyecto ‘Mujer líder de tu propio desarrollo’ no sólo debe contemplar la formación a mujeres, sino también la creación y puesta en marcha, de por lo menos, mil unidades de negocio para el primer cuatrienio.
Establecimiento de tres casas de refugio para mujeres víctimas de violencia intrafamiliar. Estos hogares de paso, deben ofrecer servicios de acompañamiento integral (jurídico-psicosocial) a las mujeres y sus hijos, se propone la atención de mínimo 400 casos anuales.
Fortalecimiento del Consejo Municipal de Mujeres, como espacio de convergencia entre las mujeres del Distrito y la institucionalidad, para la construcción conjunta de propuestas para el fortalecimiento del rol social, político y económico de la mujer.
Creación de la Secretaría de la Mujer, como entidad encargada de articular los procesos, con recursos económicos y humanos suficientes para atender las problemáticas de la mujer en la ciudad.
Reconocimiento a los derechos de las personas LGBTI de Barranquilla
Barranquilla es una de las capitales con mayores niveles de violencia hacia las personas LGBTI con fenómenos como el homicidio ( 10 asesinatos de líderes LGBT en 2015), violencia policial (siendo junto con Cartagena las ciudades que presentan mayor número de estos casos) y amenazas de muerte (condensadas en panfletos y expresiones verbales y simbólicas hacia ellos y ellas en espacios públicos de la ciudad), además de ello, las expresiones de matoneo escolar y la negación en la atención, sobre todo hacia las personas trans en los servicios de salud y de trabajo son constante en el distrito; ésta situación bien conocida por la administración, si bien recibió respuestas inmediatas en el gobierno pasado a pesar que no quedó esbozado en el anterior Plan de Desarrollo por solicitud de personas LGBTI en los cabildos públicos y en comunicados a su despacho, solicitando que éste Plan de Desarrollo, al igual que lo hacen el resto de las ciudades capitales, ofrezca garantías de protección a las personas LGBT del distrito.
Es necesario que Barranquilla como capital de vida, no solo garantice respeto por la diversidad sexual y de género; sino y que sobre todo avance a un reconocimiento integral de su ciudadanía plena, acceso eficaz a los derechos de manera integral y que oferte servicios ciudadanos con enfoque diferencial y atención preferencial a las personas LGBTI, buscando superar su estado de vulnerabilidad y nivel de indefensión que viven en la región.
Dentro de la Propuesta de Plan de Desarrollo que se lee en el documento que el Concejo distrital estudia, se identifican acciones hacia personas LGBTI solamente en el item de Convivencia y seguridad ciudadana, indicando que: Fortalecimiento De La Seguridad, La Convivencia Y La Prevención De Violaciones A Los Derechos Humanos En El Distrito De Barranquilla. (Prevención De Violaciones A Los Derechos A La Vida, Libertad, Integridad Y Seguridad Personal). proponiendo como indicador la atención a personas LGBT defensoras de derechos humanos y de otro lado y en el mismo Item, se porpone en: Cultura En Derechos Humanos, Igualdad Y No Discriminación. Superación De La Estigmatización Y Discriminación, Numero de estrategias que promuevan la inclusión social y el respeto de los derechos de población LGBTI.
Acciones que son mínimas, no garantizan integralidad y vida digna a las personas LGBT y no aportan a promover una cultura ciudadana respetuosa de la diversidad sexual y de género, por ello:
En cuanto las propuestas para la inclusión y atención a la población LGBTI, desde Caribe Afirmativo, planteamos las siguientes acciones para ser recogidas en el Plan de Desarrollo:
Construir una linea de base distrital sobre la situación actual de las personas LGBTI en el la ciudad de Barranquilla.
Dar inicio a la formulación e implementación de una política pública distrital para la diversidad sexual y de género en Barranquilla.
Incluir en el Observatorio ciudadano de violencia y seguridad indicadores que monitoreen la situación de los derechos de las personas LGBTI en la ciudad de Barranquilla.
Instalar una Mesa Distrital, interinstitucional, presidida por el distrito para la prevención de violencia y atención a las solicitudes de las personas LGBTI para su ciudadanía plena.
Construir dentro de los procesos distritales, rutas especializadas de atención a las personas LGBTI
Garantizar la inclusión, aplicación y puesta en marcha de los avances constitucionales y legales para la garantia de derechos de las personas LGBTI.
En las acciones con las mujeres garantizar un enfoque diferencial (ciclo vital, LGBTI, discapacidad, etnias) en equidad, liderazgo y género formados que permita la cobertura hacia mujeres LBT.
En educación, realizar procesos para una educación en la inclusión, donde desde los colegios se pueda garantizar el respeto de todas y todos sin importar su orientación sexual e identidad de género.
Implementar jornadas de prevención de enfermedades de transmisión sexual; Garantizar los servicios de salud de manera efectiva a la población LGBTI, haciendo especial énfasis en las mujeres trans; Seguimiento y apoyo a mujeres Trans que realizan trabajos relacionados con la prostitución; Acompañamiento psicosocial. Estas acciones deben ser ejecutadas en todos los centros de salud de la red distrital de Pasos y Caminos.
Promoción, respeto y fomento de las expresiones artísticas y culturales de las personas LGBT que habitan el territorio.
Entre las acciones afirmativas transversales se propone: a) Sensibilización y capacitación a funcionarios públicos sobre temáticas LGBTI, b) Diagnóstico situacional/línea base sobre situación de las personas LGBTI en el Distrito.
Coalición ciudadana