15 de agosto de 2020. En horas de la mañana del 3 de agosto del presente año en la invasión Las Mercedes de Valledupar, Cesar, Valentino Alberto Silva Colmenares, oriundo de Venezuela, en situación de irregularidad, con tan solo 19 años fue interceptado por tres sujetos, quienes decidieron agredirlo con machete y con otros objetos contundentes a su disposición. Valentino era un hombre abiertamente bisexual quien compartía vida con su pareja, un hombre abiertamente gay, con quien había construido un hogar. Algunos testigos de los hechos y la propia víctima manifestaron que los sujetos dijeron: “vamos a golpear al marido de la marica esa”.
El caso fue reportado en los medios de comunicación como un intento de hurto, pero esta situación no ha sido clarificada. Valentino se defendió de las agresiones lesionando a Jorge Durán alias “Tan” causándole heridas superficiales, huyendo del lugar según los informes de la Policía, siendo capturados los otros sujetos. Silva Colmenares al quedar herido fue auxiliado y llevado al Hospital Eduardo Arredondo Daza- sede Ciudadela 450 Años de Valledupar, pero por las lesiones que presentaba, en las que se encontraba heridas en las extremidades (una cortadura en área de su pierna derecho que le afecto el tendón, lesiones en sus brazos) en su rostro y cabeza, tuvo que ser remitido al Hospital Rosario Pumarejo de López, siendo ingresado a la sala de cirugía. Tras 15 días internado Valentino falleció hoy; en su hogar aún se desconoce si producto de las heridas.
Este caso tuvo seguimiento estricto por parte de la Fundación Mariposas Verdes en cabeza de Yuliana Ángel, quien ha venido informando y realizando gestiones en temas de salud, acceso a derecho y ahora en materia de conseguir recursos para darle sepultura a Valentino. Reconocemos el trabajo incesante por las personas LGBTI por esta organización y otros aliados en este territorio.
Como Caribe Afirmativo se manifiesta una enorme preocupación sobre las situaciones de violencias y la ausencia de las garantías de protección de los derechos de las personas LGBTI en el Caribe Colombiano, pero con un detalle específico en el Cesar y su cabecera Valledupar. En el periodo comprendido desde enero hasta julio del 2020 en Valledupar se han reportado 4 casos de homicidios a personas visiblemente LGBT, junto a este serían 5 casos, de los cuales 2 son de personas migrantes LGBTI, aunado que a los ataques a las mujeres trans. A nivel regional con este sería el tercer caso de muertes violentas a personas visiblemente LGBT (importante recordar a Yojarmis Rincón asesinado el 7 de febrero en Valledupar, Cesar, y Gabriela asesinada el 22 de julio en Soledad, Atlántico).
Por ello, hacemos un llamado de atención a las entidades territoriales y a todas las instituciones a tener en cuenta los derechos de las personas migrantes y refugiadas venezolanas con énfasis el acceso de justicia, puesto que el prejuicio y la xenofobia agudizan el tratamiento diferenciados que niega y obstaculiza el derecho, llevando y justificando círculos de pobreza y marginalización, y aumentando el grado de impunidad.
En un estricto sentido, este pronunciamiento exhorta de manera urgente a la Policía Nacional y a la Fiscalía General a realizar una investigación profunda y certera que permita esclarecer los hechos, con mayor especificidad que dicho esclarecimiento permite vislumbrar si la orientación sexual de la víctima fue un móvil que llevara a formas y expresiones de prejuicio en el ataque, sin menoscabar las afirmaciones de testigos sobre los pronunciamientos de los victimarios en la comisión del delito que pueden ser entendidos como indicios de violencia por prejuicio. Asimismo, que se tenga en cuenta la aplicación del protocolo con enfoque diferencial por estar ante una victima con múltiples identidades sociales.
Por otro punto, no se puede obviar la posibilidad de la muerte producto de negligencia de las heridas, esto basando en la existencia de protocolos instaurados en Valledupar para el seguimiento, control y verificación de los casos de violencias y demás situaciones que afecta a la salud, que exige el cumplimiento de una ruta. Lo anterior conlleva a interrogantes sobre si hubo prejuicio en el juicio de en la atención médica que haya influido en la muerte de Valentino y si las autoridades dimensionan las realidades de las personas LGBTI y les migrantes y refugiades en los territorios.
Reiteramos el lamento por el fallecimiento de Valentino y con solidaridad acompañamos a su pareja, familiares y amigos en el dolor, manifestando el compromiso por realizar seguimiento al caso y poner a disposición los servicios y herramientas como organización comprometidas por los derechos de las personas con orientaciones sexuales e identidades de género diversas.
¡JUSTICIA POR LA VIDA DE LAS PERSONAS LGBTI!