Es preocupante la desinformación por parte de los medios, que no solo refuerzan estereotipos sexistas de cómo debería verse una mujer, sino también demeritan las capacidades de estas grandes atletas atribuyéndole sus triunfos a una identidad de género de la cual no tienen certeza, y desconociendo que las mujeres cisgénero también pueden tener niveles altos de testosterona.
01 de agosto de 2024. Los Juegos Olímpicos han estado llenos de múltiples polémicas y en casi todas se ha involucrado a las personas LGBTIQ+. Recientemente, la boxeadora argelina Imane Khelif ha sido víctima de comentarios transfóbicos y hostiles al asumir que es una mujer trans porque, en su reciente pelea contra la italiana Angela Carini, esta última abandonó el ring después de recibir un derechazo en el rostro por parte de Khelif.
Esta polémica se potencializa porque, en 2023, Imane y la taiwanesa Lin Yu-Ting fueron descalificadas del campeonato mundial femenino por no cumplir con las normativas de la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) respecto a los niveles de testosterona que de manera natural producen sus cuerpos. Es importante destacar que en los Juegos Olímpicos solo están participando un hombre trans y dos personas no binarias, porque las regulaciones de estos impiden la participación de mujeres trans en estos juegos.
Es preocupante la desinformación por parte de los medios, que no solo refuerzan estereotipos sexistas de cómo debería verse una mujer, sino también demeritan las capacidades de estas grandes atletas atribuyéndole sus triunfos a una identidad de género de la cual no tienen certeza, y desconociendo que las mujeres cisgénero también pueden tener niveles altos de testosterona, esto por afecciones en sus cuerpos.
Desde Caribe Afirmativo, vemos con gran preocupación que estos comentarios continúan siendo replicados en medios de comunicación nacionales e internacionales, respaldados también por mandatarios y mandatarias que perpetúan discursos transfóbicos. Estos refuerzan estereotipos dañinos e incentivan la perpetuación de violencias hacia las personas trans.
Esperamos que haya claridad ante esta situación, ya que ninguna persona debería enfrentarse a comentarios tan hostiles y horribles por no encajar en los estereotipos de cómo debería ser o verse una mujer o un hombre. Mucho menos, su disciplina y persistencia deben verse reducidas a comentarios machistas que atribuyen sus triunfos únicamente al hecho de ser una mujer trans, algo que sigue siendo una especulación. Es fundamental que se reconozca y se valore el esfuerzo y los logros de cada una de estas atletas.