Activísmo Derechos Humanos

El legado de Laura Weinstein y sus enseñanzas desde el trabajo con el grupo de apoyo a personas trans, es un capital para la transformación y el empoderamiento del Movimiento LGBTI de la región

4 de enero. Hoy lamentamos la muerte de Laura Frida Weinstein, una de las lideresas trans más significativas en toda la historia del movimiento, y quien se desempeñaba desde el 2009 como directora ejecutiva de la Fundación Grupo de Acción y Apoyo a personas Trans (GAAT), organización dedicada a la lucha por los derechos de las personas trans en Colombia.

Laura seguirá entre nosotros, porque nos deja el legado de su vida dedicada a un activismo que continuará garantizando la plenitud y la vida digna de las personas trans.

Caribe Afirmativo conoció a Laura Frida Weinstein, siendo una funcionaria de la alcaldía de Bogotá en el Centro de la diversidad sexual, en una época en la cual nuestra entidad, estaba naciendo como Corporación y fue esta mujer, una de las primeras personas que contactamos para nuestros aprendizajes dado que, por su labor en el centro de la diversidad sexual, era la primera en entablar el primer contacto con la ciudadanía y orientar los servicios.

Desde ese momento la percibimos como una mujer empoderada, generadora de puentes y constructora de espacios de diálogo, ya que lejos de hacer un trabajo mecánico  interrogando simplemente sobre sencillos datos de identificación tales como  nombre de las personas,   un formal “¿qué necesita?” y un frio “pase usted”, entablaba conversaciones con los ciudadanos que ingresaban al lugar, mostrando un sincero interés por sus vidas y evidenciando un acompañamiento integral, todo lo cual, de hecho empieza a desarrollar en ella una vocación de servicio y de trabajo comunitario que madura más adelante con la creación del grupo de apoyo a personas trans. Es así como siendo aún funcionaria de la alcaldía decide salir del Centro de la Diversidad e ir a los territorios y encontrarse con la gente, esa misma gente que venía al Centro de la diversidad solicitando apoyo y ayuda. Esta noble mujer de origen judío, y amplísima vida espiritual, empieza a extender puentes en la vida cotidiana de las personas, y esto fue precisamente uno de los criterios que aprendió Caribe Afirmativo para hacer trabajó comunitario

Laura Frida siempre entendió el activismo como “un ejercicio de activar puentes”. Siempre la recordaremos como una activista que combinó dos virtudes muy escasas en el activismo:  la facilidad de conciliar y encontrar puntos en común, y la inteligencia y sencillez para no aparecer ella como una lideresa y una diva, sino simplemente estar ahí empujando para que las obras se den. Esa capacidad de conciliar y no hacer protagonismo es precisamente la que la convierten en precursora de una nueva forma de hacer activismo, muy diferente a la utilizada durante los 30 años que lleva el activismo LGBTI en Colombia.

Se identifica una propuesta espontánea de activismo para los últimos 10 años en el país que Laura impregna con su personalidad de lideresa, como un activismo muy significativo al ser especialmente conciliador, buscando puntos en común, sin perseguir   visibilizar personas, sino procesos lo cual es un legado muy importante en un momento en el cual Colombia presenta mucho activismo trans. Esta maravillosa mujer demarca entonces, un tipo de activismo menos personalista y más de aparición de procesos.

Otro aspecto interesante en la vida de Laura Frida, es la Importancia de su incidencia política, destacándose tres momentos claves en la misma:  En primer lugar, el gran significado representado por la cedulación de personas trans; en segundo lugar, la atención a personas viviendo con VIH particularmente Mujeres Trans trabajadoras sexuales y, en tercer lugar, la Política Pública LGBTI nacional haciendo incidencia para que se aplicara el plan de acción.

Con relación a esta última, Laura Frida se destaca por tres aspectos fundamentales que evidencian una gran inteligencia emocional: Primero, entendió que con los gobiernos, con los Estados y órganos de poder deben generarse puentes de discusión y de conversación y cuando las decisiones no parecían ser  las correctas y necesarias para el movimiento trans,  ella asumió  una acción muy proactiva, no haciendo críticas a lo mal hecho sino entendiendo la necesidad de crear mesas de discusión con el objetivo de superar la dificultad,  haciéndole a su vez comprender  a los gobiernos donde radicaba  dicha  dificultad.

En segundo lugar, identificó la Incidencia como un asunto de colectivo. Ella avizoraba el problema, pero antes de presentar la primicia del problema generaba mucha pedagogía con el movimiento LGBTI para que no fuera ella como persona sino un proceso colectivo, quien hiciera el papel de incidencia.

Finalmente, en materia de incidencia se destaca su gran capacidad de negociación, No negociaba principios ni derechos, pero entendía que sentarse a dialogar con el gobierno requería reconocer que hay   límites, limitantes, procesos y temporalidades, y no negociaba principios ni derechos; negociaba las formas, aceptando sabiamente que Estados y gobiernos tienen formas propias, y lo que la sociedad civil veía como un impedimento, ella lo visualizaba como una posibilidad.

Con Caribe afirmativo en el 2020, bajo el entendido de que no solo había que hacer incidencia política sino participar con el grupo de apoyo a personas trans, empezamos a hacer un ejercicio para que los LGBTI participaran en política, no solo postulando su nombre a cargos de elección popular sino ejerciendo el derecho al voto. En un ejercicio de observación se vio que muchas personas trans eran constreñidas en el ejercicio de la votación por ser maltratadas por la política o no reconocidas por su nombre identitario y de la mano con la MOE se le pidió al Concejo Nacional Electoral que Colombia tuviese un protocolo que garantizase el voto de las personas trans y en segundo lugar se realizó entonces una gran pedagogía en los procesos electorales para conseguir garantía para las personas trans.

Caribe Afirmativo lamenta mucho la perdida de Laura Weinstein a quien le debemos grandes aportes a nuestro proceso, entendiendo que ella construyó paradigmas en esta nueva forma de hacer activismo y nos comprometemos como organización a seguir trabajando en la agenda de incidencia y participación   política y seguir aprendiendo su forma de hacer activismo, haciendo así mismo hermanamiento con las personas trans por las que ella tanto trabajó.