20 de junio de 2020. El 20 de junio se conmemora el Día Mundial de las Personas Refugiadas. En el 2000, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió que este día sería anualmente una llamada a la solidaridad. Por ello, es una expresión de sensibilización sobre la situación que afrontan las personas refugiadas y responsabilidad con sus derechos. Para las personas LGBTI+ en la región, la violencia generalizada, los conflictos armados, las violaciones masivas de derechos humanos, la violencia basada en género, la violencia por prejuicios relacionados con las orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género diversas, y la pobreza son las principales causas de migración forzada. Lo cual, ha generado que numerosas personas LGBTI+ soliciten la protección internacional.
En los últimos años, América Latina ha experimentado flujos masivos de personas desde Centroamérica hacia México y Estados Unidos, desde Venezuela hacia Suramérica, de Haití a República Dominicana, desde países de Suramérica hacia Argentina, entre otros. En nuestra región, la mayoría de los países no cuenta con leyes que permitan a las personas trans, acceder a un derecho tan fundamental como el reconocimiento del género autopercibido en los documentos oficiales. Nueve países del Caribe, entre ellos Guyana y Jamaica, poseen leyes que explícitamente criminalizan los actos sexuales consensuales entre personas adultas del mismo sexo.
En muchos casos, las personas LGBTI+ huyen de la violencia, persecución, contextos de exclusión y discriminación estructural, con temor por su vida, integridad y libertad por la falta de acceso a la justicia en sus países. Por lo cual, este 20 de junio, se debe visibilizar a las personas LGBTI+ refugiadas, solicitantes de asilo, desplazadas internas y apátridas.
Desde la Red Regional de Protección de Personas LGBTI+ en Situación de Movilidad Humana, resaltamos la necesidad de adoptar y cumplir los principios de la Convención sobre el Estatuto del Refugiado de 1951 y su Protocolo de 1967. Asimismo, reiteramos la importancia de la adopción de la definición ampliada de refugiado/a de la Declaración de Cartagena como una respuesta a los problemas jurídicos y humanitarios que afectan a las personas refugiadas en la región, que se extienden y profundizan en casos de personas LGBTI+.
Finalmente, es importante abogar por la integración de las personas LGBTI+ refugiadas y solicitantes de asilo en los países de acogida. La Red insta a los Estados a adoptar medidas progresivas para el reconocimiento de los derechos de las personas LGBTI+ refugiadas y solicitantes de asilo para la promoción de contextos libres de discriminación bajo pretexto de orientación sexual, identidad de género y/o su expresión, o cualquier otro. Especialmente, se deben adoptar medidas urgentes para garantizar los derechos al trabajo, la vivienda, la educación, la identidad y el acceso a la justicia. Además, estas acciones son imperantes en el contexto actual de pandemia mundial COVID-19 y aislamiento social, ya que se debe tener en cuenta que las situaciones de vulnerabilidad y falta de acceso a derechos de las personas LGBTI+ refugiadas y solicitantes de asilo se han agudizado.
Suscriben éste comunicado las siguientes organizaciones de la Red Regional LGBTI+: Azul Positivo (Venezuela), Caribe Afirmativo (Colombia), Casa 1 (Brasil), Casinha (Brasil), Diálogo Diverso (Ecuador), FASIC (Chile), Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans – FALGBT (Argentina), Fundación Arcoíris (México), Fundación Censurados (Colombia), Fundación Ecuatoriana Equidad (Ecuador), Fundación Sergio Urrego (Colombia), LGBT+Movimento (Brasil), Rede de Mulheres Imigrantes Lésbicas e Bissexuais – MILBi (Brasil), Manifesta LGBT+ (Brasil), OTRANS (Guatemala), Presente (Perú) y União Libertária de Pessoas Trans e Travestis – ULTRA (Brasil). La Red tiene como objetivo promover y defender los derechos de las personas LGBT en situación de movilidad humana, a través de ejes de incidencia, fortalecimiento y trabajo comunitario.