Las personas con experiencias de vida trans han recuperado poder sobre la construcción de su identidad. No obstante, los avances parecen insignificantes ante la patologización y diferentes tipos de violencias.
Este domingo, por ocasión de la conmemoración del Día Mundial por la Despatologización Trans, extiendo la invitación a leer en este espacio una Reflexión Afirmativa escrita por Danne Aro Belmont, directora del Grupo de Acción y Apoyo para las personas Trans (GAAT), organización aliada de Caribe Afirmativo.
“Cuando muchas personas con experiencias de vida Trans hablamos de la importancia de la despatologización de nuestros cuerpos, no hacemos referencia sólo al hecho de no generar estigmas o representaciones sociales negativas sobre nuestras identidades en temas de salud. Hablamos de poder posicionar un tema de especial relevancia en nuestra construcción identitaria.
Hablamos de poder conversar fuera de categorías que, aunque estratégicas en algunos casos, históricamente hablando, han perpetuado acciones de violencias incluso epistémicas sobre nuestros cuerpos e identidades; Hablamos de hacer un llamado colectivo para pensar-nos fuera del marco de la transmedicalización como un único destino y poner un alto a la lectura de nuestras experiencias como una “locura”; Hablamos también de poder acompañar a nuestras familias de manera integral en nuestras vidas, hacerles parte también de nuestros tránsitos; Hablamos de mirar la vulnerabilidad y nuestras relaciones como un vehículo de transformación que necesitamos como sociedad.
La desaparición progresiva de las experiencias de vida trans, bajo nombres categóricos como transexualismo, disforia de género, discordancia de género, etcétera, sumado a los debates permanentes que se han dado al respecto en la elaboración de los manuales diagnósticos y estadísticos internacionales, nos ha brindado la posibilidad de recuperar poder sobre la construcción de nuestra identidad. Sin embargo, esto resulta insignificante para algunes, si lo comparamos con la lucha diaria que vivimos en nuestros territorios por sobrevivir la aniquilación que produce la transfobia.
Cabe recordar que los 21 casos reportados hasta la fecha (del Observatorio PREDIVA y que coincide con los reportes de Caribe Afirmativo) de personas con experiencias de vidas Trans que han sido asesinadas o han fallecido por acciones que propician barreras de acceso que ponen en riesgo nuestras vidas, también son un llamado a trabajar aún más, en procesos de cambio que posibiliten entendernos como parte de nuestra sociedad, y esto también se construye desde las representaciones sociales y los campos desde donde podamos relacionarnos con todes , incluyendo con nuestros aniquiladores y los que en potencia podrían serlo, y no sólo hablo de aquellos que nos asesinan sino aquellos que no nos contratan por ser personas con experiencia de vida trans, aquellos que no atienden nuestras necesidades de salud, aquellos que se burlan en la calle y aquellos que se niegan a llamarnos por nuestro nombre identitario sino que nos llaman por el nombre que aparece en una lista.
En la Fundación GAAT desde hace 3 años, hemos venido implementando una campaña #NaturalmenteTRANS con el fin de articular acciones que le apuesten a desescalar los discursos de odio que muy fácilmente se cuelan y camuflan en la sociedad. Esta campaña ha servido para pensarnos en la diversidad y la simbiosis como una posibilidad real y muy necesaria para el desarrollo, aprovechando conmemoraciones como el día de la Transdespatologización -Stop patologización-. En este sentido, decidimos usar como símbolo de nuestro trabajo las orquídeas como un ejemplo de la diversidad, pues son en la actualidad la familia de flores más evolucionada y morfologicamente con mayor número de reportes de diferentes especies y subespecies adaptadas en el mundo. Estas se convierten así, en un símbolo también de la necesidad del cuidado, que al igual que los microecosistemas que posibilitan la diversificación de especies en esta Familia, requiere de un ambiente propicio para permitir su existencia y preservación.
Hace 3 años por estas fechas, recuerdo la primera vez que le expuse esta idea de campaña a Laura Weinstein quién entendió también la importancia en su amplia experiencia de poder apostarle a la transformación de estos imaginarios y como lo mencionaba, en la importancia simbólica y el impacto positivo que debemos buscar en la salud mental, física y social. Recuerdo también nuestra conversación sobre poder TRANSformar entonces esos prejuicios que nos hablan de los “cuerpos equivocados” por “los cuerpos correctos en la sociedad equivocada”, la “Disforia de género” por la “Euforia de género” y “la Antinaturalidad” por unas vidas #NaturalmenteTRANS.
Hablar de la despatologizacion es entonces pensarnos en las necesidades de muchas personas Trans que día a día siguen viviendo como un continuum de violencias, barreras de acceso a sus derechos y aniquilación; por supuesto, estas deben pensarse en clave identitaria no sólo de lo Trans* como una sombrilla sino en las necesidades para las personas Transfemeninas, Transmasculinas, Personas No Binaries y con otras identidades de genero no cis. Apostarle a la interseccionalidad como el trabajo que ha venido haciendo Caribe Afirmativo en distintos territorios de Colombia se convierte en no sólo una idea de aplicación de enfoques, sino en acciones que TRANSforman nuestras Vidas.
Hablar de despatologización es hablar de Resistencias, diversidad y memoria Trans. ¡Nada por NosoTRANS sin Nosotrxs! #NaturalmenteTRANS”.
Danne Aro Belmont
Directora del Grupo de Acción y Apoyo a personas Trans (GAAT)
Invitada especial