Paloma, como se llamaba, también era víctima del conflicto armado.
La corporación rechaza el homicidio de Paloma, una mujer trans que participaba en procesos de formación, liderazgo y movilización con personas LGBTI víctimas del conflicto armado en La Guajira, y que también hacia parte de una iniciativa para recolectar información que permita construir una línea base sobre la situación de las personas LGBTI en este departamento, y así fortalecer la incidencia política de esta población en la región Caribe.
Paloma era estilista y tenía un salón de belleza en Riohacha, donde llegó hace 10 años proveniente de Lorica, Córdoba, municipio donde era oriunda. Era una de las personas LGBTI que estaba tramitando su inclusión en el Registro Único de Víctimas. Ella padeció en carne propia los rigores del conflicto armado.
El cuerpo de Paloma, con signos de estrangulamiento y varias heridas en el cuello, fue encontrado en inmediaciones del centro cultural de Riohacha, cerca de la playa. Las autoridades hicieron las labores técnicas de levantamiento del cadáver y hasta el momento se espera una declaración oficial que permita esclarecer las causas que motivaron el homicidio.
Caribe Afirmativo hace un llamado a las autoridades para que esclarezcan con celeridad la muerte de Paloma, ya que allegados a la víctima cuentan que ella se dirigía a realizar un servicio como estilista y luego volvía a su lugar de trabajo pero no supieron más de ella, hasta cuando se conoció la noticia de su muerte.
Es necesario que las autoridades del municipio y del departamento implementen medidas para la protección de las personas LGBTI, sobre todo a las que también son víctimas del conflicto armado. Es necesario que se cumplan con las medidas y compromisos que se han suscrito por parte del Estado para garantizar la vida e integridad de las personas con orientación sexual e identidad de género diversas.