Caribe Afirmativo, desde sus espacios de trabajo comunitario en el posconflicto llamados Casas de Paz en cuatro lugares de alta afectación del conflicto armado: Maicao (La Guajira) Ciénaga (Magdalena) Soledad (Atlántico), Montelíbano (Córdoba) y El Carmen de Bolívar (Bolívar), y equipos de trabajo en Barranquilla y Cartagena, hace un llamado a la Policía Nacional para que reanude sus compromisos con la protección y la garantía de derechos de las personas LGBT; asimismo, pide que se activen mecanismos medibles de evaluación, sanción y prevensión de las denuncias sistemáticas de violencia policial, que sigue presente, particularmente hacia las mujeres trans en el uso y disfrute del espacio público.
Desde 2010 Caribe Afirmativo ha tenido cuatro trabajos colaborativos con la policía:
1. Formación a policías del Caribe con el apoyo del Programa de DDHH de USAID en La Guajira y Bolívar 2010 y 2011,
2. Activación del Centro de Formación No presencial Rolando Pérez para Policías en dos ciclos:
a) 2011 a 2013 en las regiones Caribe y Pacífico, con apoyo del Programa de DDHH de USAID y b) en 2015 y 2016 con Colombia Diversa y Santamaría Fundación y el apoyo de ls Unión Europea.
3. Participamos en las consultas para el ajuste de la directiva 006 de 2010 liderada por el Programa de DDHH de USAID y en el trabajo comunitario, revisamos y construimos recomendaciones a la figura de Policía Enlace en Tolima, Nariño, Cauca, Bolívar y Guajira con el Programa de DDHH de USAID.
En los últimos 10 años, más de 140 personas LGBT han sido víctimas de homicidios y feminicidios, ha habido más de 70 amenazas y más de 40 casos de violencias en todo el Caribe colombiano. Estos altos índices de violencia, acompañados de amplios márgenes de impunidad, dado que muy pocos casos llegan a tener sentencias donde se sancionen a los responsables, se convierten en uno de los principales problemas para que la personas LGBT puedan ejercer una ciudadanía plena y para generar espacios de convivencia pacíficos.
Retomando los casos de violencia policial, la Policía Nacional ha ejercido múltiples formas de violencia por prejuicio contra las personas LGBT, tanto en el marco del conflicto armado como fuera de él, en razón de su orientación sexual, identidad de género y/o expresión de género diversa. Esto ha sido documentado por las organizaciones sociales en distintos territorios del país. Para lograr transformar esta situación, es necesario tomar medidas en diferentes niveles.
Para empezar, es importante que la Policía Nacional reconozca la responsabilidad de sus agentes en estos hechos y que el móvil de estas violencias son los prejuicios socialmente arraigados. De lo contrario, no podrá empezar a tomar las medidas necesarias para erradicar las violencias mencionadas. Una vez exista un reconocimiento institucional, será necesario tomar, entre otras, las siguientes medidas:
- Desarrollar un programa de capacitación obligatorio sobre diversidad sexual y de género, derechos humanos y enfoque de género para quienes aspiran a ingresar a la Policía y quienes ya hacen parte de ella.
- Desarrollar un programa de capacitación obligatorio sobre el tratamiento respetuoso de los derechos de las personas con identidad de género diversa, las garantías el uso del espacio público para ellas, y el respeto del ejercicio de su trabajo (incluido el trabajo sexual).
- Garantizar la participación de organizaciones sociales LGBT y personas LGBT en las jornadas de trabajo de los programas de capacitación.
Caribe Afirmativo