11 de julio de 2020. Leidy Padilla Daza, de 41 años de edad, era una mujer trans muy conocida en Valledupar; su hermano, también gay, había sido asesinado años atrás en el municipio La Jagua de Ibirico. Ella, trabajaba desde hace muchos años en su propia peluquería en la capital de El Cesar, además lideraba acciones de prevención en materia de VIH /SIDA en el espacio público; hacia parte de la organización de la marcha LGBTI de esa ciudad y acompañaba los procesos de la organización LGBTI Matices.
En la tarde del día de hoy, como era costumbre y aprovechando que su sector laboral ya está autorizado para prestar servicios, según las normas expedidas por la alcaldía en los días de la pandemia, Leidy estaba prestando servicios de peluquería en su local ubicado en el barrio Villa del Rosario, cuando un sujeto, luego de una discusión la obligó a salir a la vía pública y allí, mientras ella, estaba en estado de indefensión, le propinó un ataque con un arma blanca a la altura de su abdomen y cuello, dejándola gravemente herida. De inmediato fue traslada a un centro asistencial de la ciudad, donde minutos después perdió la vida.
Con el asesinato de Leidy, son ya cuatro las lideresas y los líderes LGBTI que han sido asesinados en ese departamento en lo que va de 2020: el 6 y 7 de febrero, fueron asesinados en esa ciudad los jóvenes gais: José Alfredo Orozco y Yojarmis Rincón, respectivamente, este último de nacionalidad venezolana, y el 9 de abril, el joven universitario Edwin Redondo, conocido también por su activismo LGBTI. En lo que corresponde a la región Caribe, el asesinato de Leidy, es el caso número 15 que se presenta en lo que va del año, de los cuales 12 han ocurrido en el marco de la pandemia y las medidas de aislamiento; preocupa además que la mayor afectación de la violencia homicida en la región es contra las mujeres.
5 de las 15 personas LGBTI que han muerto violentamente en la región en lo que va de 2020, eran trans (6 lesbianas, 5 trans y 4 gais): en Barranquilla, Paloma el 16 de abril y Brandy Carolina el 1 de junio, ese mismo día fue asesinada Ariadna en Santa Marta; el 13 de junio, Estefanía en Cartagena y, hoy 11 de julio Leidy en Valledupar.
Desde Caribe Afirmativo, hacemos un fuerte llamado a la Fiscalía para que investiga con celeridad todos los casos de homicidios, feminicidios y violencia contra las personas LGBTI. En lo que corresponde a Leidy, por tratarse de una mujer trans, con un liderazgo ampliamente reconocido, debe tenerse en cuenta y de manera central el análisis del feminicidio como una hipótesis, tal como lo señala la Corte Constitucional (en C-539 de 2016), con el fin de determinar si las motivaciones que tuvo quien la hirió hasta matarla, estaban relacionadas con su identidad de género.
Solicitamos a la alcaldía municipal, activar de inmediato las acciones comprometidas en el Plan de Desarrollo para proteger la vida de las personas LGBTI en esta ciudad, y activar acciones de pedagogía y cultura ciudadana, tendientes a promover el respeto y reconocimiento de las personas en razón de su orientación sexual, identidad y expresión de género.
A la organización Matices y a las y los activistas de Valledupar y de El Cesar, les mandamos un saludo solidario, en estos momentos tan difíciles y rodeamos con la convicción que nuestra región tiene que garantizar el respeto por la vida de las personas LGBTI y dotar a quienes hacen activismo de todas las medidas para trabajar por la igualdad y la justicia social no les cueste la vida.
Caribe Afirmativo