14 de abril de 2021. El pasado 11 de abril, en el municipio de Puerto Libertador (Córdoba), se conocía el homicidio del ciudadano JAIVER APARICIO, familiar de dos (2) líderes LGBT del municipio del Alto San Jorge. El hecho ocurre cerca al barrio 13 de agosto y los niveles de violencia, sevicia y crueldad ejercida en la humanidad de JAIVER, es un recuerdo de todas esas victimizaciones que, en el marco o con ocasión del conflicto, se perpetraron contra personas LGBT o sus familiares. Estas violencias siguen siendo un recuerdo vívido de lo macabro de la guerra y su uso indiscriminado de parte de grupos armados organizados de variada índole y múltiples contra grupos de personas históricamente excluidas, invisibilizadas, violentadas.
Recordemos que el sur de Córdoba es geográficamente estratégico para varios grupos armados que en el territorio siguen perpetuando violencias contra sociedad civil como homicidios, desplazamientos, amenazas panfletarias, abigeato, manejo de redes de microtráfico en las zonas urbanas y control de la movilidad para el narcotráfico porque el territorio sirve como corredor entre la región Caribe, el Bajo Cauca, el norte y Urabá antioqueño. Esta subregión tiene como nodo central el Parque Nacional Paramillo, espacio utilizado para el cultivo y ‘cocina’ de drogas como la cocaína. El control territorial de este parque natural resulta importante por la extensa red de conexiones terrestres y fluviales que ofrece (La Silla Vacía, 2020).
En la misma fecha, 11 de abril, pero en el municipio de Apartadó (Antioquia), se conoce un presunto hecho de homicidio en grado de tentativa contra un hombre gay de nombre CARLOS, quien es vecino del barrio San Fernando de esa localidad urabaense. Los hechos se conocen luego de la denuncia en redes sociales de varios líderes y lideresas LGBT del territorio quienes conocen de los hechos victimizantes, llaman a presionar e implementar las rutas de atención adecuadas al ciudadano, con una exigencia de justicia, mayor seguridad y la garantía de mayores espacios seguros y confiables para las personas LGBT en el Urabá antioqueño.
Estos hechos, forman parte de unas violencias sistemáticas en contra de las personas LGBT o sus familiares, que evidencia la desprotección en la cual están sumadas, por la continua excusa por parte de las instituciones colombianas de desmeritar, no investigar, no priorizar o cerrar los casos en donde las víctimas son personas LGBT. Recordar al Estado colombiano, sus instancias de gobierno como el Ministerio del Interior, a las Gobernaciones de Córdoba y Antioquia, las Alcaldías de Puerto Libertador y Apartadó, demás funcionarias y funcionarios de la Defensoría del Pueblo –Nacional y Regionales– o las Personerías Municipales para que acompañen las exigencias de justicia de la ciudadanía LGBT de estos territorios, esto es, investigaciones integrales que generen esclarecimientos de los hechos violentos, autores y determinadores, asimismo, logre disminuir los niveles de vulnerabilidad frente a la seguridad e integridad personal de las personas LGBT en Córdoba y Antioquia.
Desde CARIBE AFIRMATIVO rechazamos profundamente estos hechos violentos, el homicidio de JAIVER y el homicidio en grado de tentativa de CARLOS nos llama, junto al acompañamientos a la ciudadanía LGBT de Córdoba y Antioquia, a exigir justicia real y material para las víctimas y sus familiares, buscar a los responsables, juzgarles y establecer garantías y medidas cautelares en favor de la ciudadanía LGBT víctima y sus familias, garantizando la no repetición de estos hechos violentos, generando espacios de confianza y seguridad a la ciudadanía LGBT en todo el territorio nacional. Como organización comprometida con los derechos de las personas LGBT y la construcción de paz en Colombia, reiteramos y exigimos de la institucionalidad: dar prioridad a lo que ocurre en los territorios donde la autoridad civil es difusa, priorizar los casos de victimizaciones contra personas LGBT o sus familiares y brindar la protección debida a las defensoras, defensores de derechos humanos, líderes, lideresas sociales y campesinas, y activistas que ven su activismo en peligro.