De cara a la posesión de quienes estarán a cargo de alcaldías, gobernaciones, concejos, asambleas y JAL, hacemos entrega a los gobiernos entrantes de este decálogo que recoge los puntos más importantes que deben atender en materia de derechos LGBTIQ+.
Invitamos a las personas que estarán al frente de las alcaldías y gobernaciones en Colombia a partir del lunes 1 de enero de 2024 a que tengan en cuenta criterios de enfoque de diversidad sexual y de género en su gobernabilidad, especialmente en lo que se refiere a la garantía de derechos de personas lesbianas, gais, bisexuales, trans, intersex, no binarias y queer que viven en sus territorios.
En Colombia, las personas LGBTIQ+ cuentan con todos los derechos, y dada su situación de riesgo y vulnerabilidad, la Corte Constitucional las reconoce como sujetos de especial protección. Es responsabilidad de los gobiernos garantizar sus derechos.
Por ello, para que tu ciudad o departamento sea un territorio garante de derechos para las personas LGBTIQ+, tu Plan de Desarrollo debe:
- Recoger las acciones que en esta materia ya venían impulsando los gobiernos anteriores y garantizar su continuidad. Esto incluye acciones afirmativas, línea de base, implementación de políticas públicas y programas especiales para superar el déficit de derechos.
- Articular con el Gobierno Nacional en la territorialización de acciones que se están implementando a nivel nacional. Entre estos destacan la Política Pública Nacional, la Mesa de Casos Urgentes para prevenir e investigar la violencia, y otras acciones de fortalecimiento a los entes territoriales liderados por la vicepresidencia en su Gerencia de Diversidades, el Ministerio de la Igualdad y la Dirección de DD.HH. del Ministerio del Interior.
- Activar un diálogo con la sociedad civil organizada de su territorio, que comprende las necesidades y retos más apremiantes, así como las prácticas que se deben instaurar. No hay un territorio en Colombia que carezca de liderazgos y activismo de diversidad sexual y de género, siendo ellas las interlocutoras clave que requieren garantías para la participación.
- Crear y mantener mesas de trabajo locales con la Policía, la Fiscalía y el Ministerio Público. Estas son necesarias para investigar los hechos de violencia que afectan a las personas LGBTIQ+ en el territorio y promover políticas de prevención integral en los espacios de cultura ciudadana.
- Garantizar que los establecimientos educativos del territorio tengan manuales de convivencia respetuosos de la diversidad sexual y de género. Es necesario que docentes y padres de familia cuenten con las herramientas necesarias para acompañar la educación de estudiantes LGBTIQ+, y que se garantice su acceso a la educación sin detrimento del libre desarrollo de su personalidad.
- Promover la salud pública con enfoque diferencial. En nuestros territorios hay un alto número de personas LGBTIQ+ que viven con enfermedades que les generan altos gastos económicos. También muchas personas viven con VIH y experimentan barreras en el acceso al sistema de salud por estigmas relacionados por su orientación sexual, identidad o expresión de género. Urge que en un proceso preventivo y de atención primaria en salud se vinculen protocolos y rutas de atención diferenciales.
- Incentivar a las empresas, empleadores y promotores de empleo en el territorio para promover políticas de inclusión laboral que vinculen a personas LGBTIQ+ al mundo del trabajo y garanticen ambientes laborales libres de discriminación. Además, incluir a las personas sexo-género diversas en proyectos productivos y procesos de empleabilidad.
- Articular políticas de uso y disfrute del espacio público y el fortalecimiento de espacios culturales y festivos. Se debe garantizar la participación de las personas LGBTIQ+ y evitando cualquier acción o decisión que limite su disfrute de lo público como un derecho.
- Priorizar como acción afirmativa, dada la situación de altísimo riesgo que viven las personas con experiencia de vida trans y no binarias, acciones encaminadas a que puedan superar la situación de precariedad y tener acceso efectivo a derechos.
- Acoger a la ciudadanía migrante es una prioridad y, en Colombia, muchas personas en movilidad humana son LGBTIQ+. Deben ser incluidas en los procesos de acogida y en las políticas de bienestar y restitución de derechos.
Recuerda que el Plan de Desarrollo debe garantizar la participación de los grupos sociales y poblacionales del territorio, incluyendo a las personas LGBTIQ+. Tenlas en cuenta para formar parte del Consejo Territorial de Planeación y de las Mesas sectoriales. Seguramente contribuirán a pensar el territorio desde la perspectiva de la diversidad.